Final de "Ser polvo"

... Oí los pasos de un hombre, se de tuvo como si hubiera frenado de golpe frente a mi cara barbuda. Se asustó de pronto y empezó a huir, luego, venciéndole la curiosidad, volvió e intentó desenterrarme con una navaja. Inquieto, quise hablarle par a que me dejase en el barro, pero mi voz, ya no se escuchaba; y me mantenía en movimiento como para que me entendiese.Pero mi intento fue en vano porque el condenado me extrajo de la tierra y quedé estupefacto cuando vi que de mis piernas salían raíces gruesas y mi abdomen estaba tan duro como un tronco. Estaba desilucionado porque como hombre ya no servía para nada,  y aquel señor me había quitado lo único que me quedaba, ser un vegetal.