domingo, 26 de septiembre de 2010

Aeropuerto: Patria en tránsito.


<<Aeropuerto: patria en tránsito>> 1er capítulo de la novela "Como viajar sin ver" de Andrés Neuman resultó muy inefable hacia mi personam puesto que nunca antes me había detenido a pensar en todas aquellas sensaciones que se aglomeran en un ser al momento de aproximarse a un aeropuerto; como lo es la ansiedad de llegar a salvo con nuestros seres queridos, o la angustia de dejarlos. Así mismo como lo expresa Andrés "Quedarnos sin nada para abordar un posible todo" (pág 18), De igual forma el valor que este capítulo pudo transmitirme fue el de la tolerancia, ya que si nos trasladamos a esta situación, el pasajero debe de ser tolerante para afrontar, quizás, un cambio de horario o de comida, y aprender a convivir por un corto periodo con toda clase de personas. Sin embargo, la frase " Volar es empezar a aterrizar" me hizo reconocer que todo en la vida es un proceso y que empezamos a hacer las cosas para estar seguros de que culminaremos.

El tiro por la culata (Final del Sennin)

Luego de que la Vieja Zorra le pidiese que trepara el pino; Gonsuké acató la orden inmediatamente y empezó a trepar el árbol, sin vacilación.

Más alto -le gritaba ella- falta muy poco para llegar a la cima. Gonzuké exhausto y al mismo tiempo entusiasmado, lleno de alegría prosiguió a la meta. En un descuido de la Zorra, Gonzuké se deslizó sobre el pino, y abandonó la cúspide, dejando su haori entre una de las ramas del pino quedando totalmente desnudo.

Cuando ella regresó al jardin, a ver que había ocurrido con Gonsuké, se encontró con tremenda silueta, admirada abrió sus ojos al estilo Lady Gaga y al acercarse, se dió cuenta que mejor los había dejado cerrados, pues sentía que estaba apreciando una de las fotografías de Jesús Micó en vivo. Gonsuké al verla le dijo excitado -Ya descubrí el secreto para ser un Sennin- y la Zorra espantada salió corriendo donde su esposo, quien la estaba esperando, pues él y Gonsuké le tenían preparado tremendo banquete.

Sennin.



A mi parecer es un texto muy enriquecedor, pues narra  la historia de un sirviente que tenia una meta en la vida que era ser un sennin, y estaba dispuesto a hacer lo que fuese necesario para lograrlo. Tan dispuesto que dedicó 20 años de su vida a servirle a una pareja de esposos que supuestamente sabían el secreto para llegar a ser un sennin, sin importarle que no iba a recibir paga alguna por sus servicios. Considero que nos deja una gran moraleja y es que debemos de ser perseverantes en la vida si queremos lograr algun objetivo o alcanzar alguna meta deseada.



jueves, 23 de septiembre de 2010

El Columpio.


Me fascinó el corto "El columpio" dirigido por Älvaro Fernández Armero, ya que es muy preciso y está libre de ambigüedades. En cierto modo me identifico con él, pues ¿Quien no se ha visto en una situación similar a la de un columpio?; cuando nos acercamos se alejan, y cuando se alejan nos acercamos. Como cita Coque Malla en una frase "La clave es la autoconfianza", debemos de creer en nosotros mismos, para que los demás puedan creer en nosotros. Ademas, no podemos desperdiciar ni un momento de nuestras vidas, ya que el tiempo siempre está en crisis. Es la crisis.

Tambora para un ángel.


La Canción "Ángel para una tambora" interpretada por Juan Luis Guerra, resultó muy agradable al momento de escucharla, debido a que acopla el viscoso ritmo de la tambora con la voz tan singular del cantautor en conjunto con la melodiosa orquesta 440. Del mismo modo cabe destacar que me sentí muy familiarizada con la pista y al mismo tiempo con la letra de la canción, pues en ella salen a relucir las raíces del músico, pues la tambora es uno de los principales instrumentos musicales utilizados en Santo Domingo y a la vez, la canción le rinde honor a Ramón Andujar mejor conocido como Catarey, uno de los mejores tamboreros de la década de los ochenta en el país.

La diferencia nos hace ser lo que somos.


Me siento muy honrada y a la vez complacida de haber podido apreciar tan valiosa colección que llevaba por nombre " La diferencia es lo que nos hace ser lo que somos", ya que en ella se encontraban un sinnúmero de fotografías realmente dignas de exaltación de autores  tales  como: Jesús Micó con "Taxonomías" que es una serie de combinaciones de fragmentos de personas, siempre hombres y mujeres, fotografiados de frente, de espaldas y en los dos perfiles. Garrido Amparo con "De lo que no puedo hablar" donde vemos a estos grandes monos (Los Gorilas) que tienen casi igual ADN y costumbres que los hombres.Y por último,  Carmela García con "I want to be" donde la autora reivindica una mirada propia, un mundo propio, donde la mujer ha sido construida a través de la mirada del hombre. Cada autor en sus retratos plasma un concepto diferente, pero según mi parecer en conjunto, todas estas fotografías nos dan un flashback a la época de la evolución; ya que vemos cronológicamente como el ser humano ha ido evolucionando hacia lo  que somos hoy, seres totalmente diferentes y al mismo tiempo igual a los demás.

Men in the chair.


Desde mi punto de vista considero que la película "Man in the chair" es un filme muy emotivo, ya que nos muestra a nosotros, los seres humanos, que debemos ser grandes aspirantes en la vida, tener pasión por lo que hacemos y procurar que lo que ejecutemos sea de calidad. Del mismo modo, es un placer destacar los grandes y formativos mensajes que persigue transmitir esta pieza. Primero, cuando estamos en la cima de la gloria y felicidad, no nos podemos olvidar el porqué y gracias a  quienes hemos llegado hasta allí, debemos ser agradecidos con nuestros intermediarios  y no pisotearlos al creernos superiores; Por otro lado,  en el mundo no hay masas prescindibles, todos los seres somos importantes, cumplimos cierta función; tenemos habilidades para algun oficio o variable del arte, solo  que debemos hacerlas empíricas, no teóricas.